jueves, 17 de septiembre de 2009

viernes, 4 de septiembre de 2009

PRÓFUGAS DEL TOMPIATE

Recién iniciado el período de sesiones de la LXI Legislatura, ocho diputadas electas y selectas: cuatro del verde, dos del PRI, una del PRD y otra del PT, pidieron licencia para que sus respectivos suplentes, todos hombres machos del sexo masculino con tompiates y demás atributos secundarios, ocupen los escaños diputadiles en donde ellas pudieron haber dejado la huella de su vocación política.
Desbandada de tales dimensiones, hace suponer que atrás de ella existían arreglos, concertaciones y tranzas para llenar la cuota de género en el período de elecciones, y una vez ganado el espacio se aplicase el consabido principio político de “quítate tu para ponerme yo”.
Resulta alarmante el hecho de que semejante truco esté tan difundido entre los partidos y que, haya damas, mujeres, del sexo femenino con ovarios y demás atributos secundarios, que hubieran aceptado una componenda tan ajena a la regla.
Siempre nos había parecido injusto y ofensivo llamar prófugas del metate o prófugas del petate a las señoras que no se dedicaran a las labores “propias de sus sexo” como decían los antiguos escribanos de los juzgados y notarías, pero la componenda ahora visible, pone en un entredicho razonable a estas diputadas electas que enseñando el cobro, le dejan su lugar a sus sinvergüenzas soplantes… perdón, suplentes. De los partidos ya ni se diga, todos sabemos que no tienen principios éticos… ni madre… o quizá tengan madre suplantada.
La corrupción ha cundido llenándonos de desesperanza y desilusión. No quisiera ver pasado mañana a Beatriz Paredes pidiendo licencia, porque entonces si, no nos quedaría más que volarnos la trampa de los sexos.